miércoles, 4 de enero de 2012

CARTA A LOS REYES MAGOS



Queridos reyes magos…hace años que ya no os escribo, tal vez demasiados. Por desgracia deje de creer en vuestros poderes y en vuestra visita anual.
Pero esos mismos años, me han hecho ver que seguís existiendo, que solo hay que mirar en nuestros corazones, para encontraros ahí guardados, escondidos,  esperando la ocasión para reaparecer en nuestras vidas de adultos, y poder recuperar, aunque solo sea por un instante, esa mentalidad infantil que tanto añoramos.
El otro día hice una foto de un crío entregándoos su carta repleta de peticiones de regalos, y la cara de felicidad con la que volvía de ese fugaz encuentro, es la que me ha hecho reflexionar y escribir yo también la mía. Me parece que ese rostro que manaba alegría, es el mejor regalo de reyes que los adultos podemos recibir, aunque no tengamos hijos, o nietos en esas edades.
Esa cara me ha trasportado a mis años infantiles, y me ha recordado que también quiero pediros algunas cosillas.
Pediros  sobretodo FELICIDAD para todos en general. Es un regalo baratito, se compra solo con una palabra amable, un beso, con un adiós, unas gracias o un buenos días.
 Y también AMOR, tampoco cuesta demasiado. Pero amor real, amor a nuestros semejantes y a todos los hombres de buena voluntad, como nos dijo ese niño que venís de  adorar en Belén.
Y para finalizar quiero pediros PAZ, paz para este planeta que parece que nunca quiere estar tranquilo, pero PAZ también para todos nosotros, que continuamente hacemos “guerra de guerrillas”, criticando y ensuciando la reputación y prestigio de nuestros vecinos y amigos, y que no paramos hasta destruirlos, como árbol caído del que todos hacemos leña.
¡ah!, y como el saco del  carbón lo llevaréis ya vacio, os rogaría que lo llenarais  hasta los topes de envidia, vanidad y soberbia, de las que tanto sobran por estas latitudes, y os las llevarais lejos, muy lejos de este mundo.
En la esperanza de ver cumplidos mis deseos, os saluda atentamente
                                                                              Manuel Molina Serrano

domingo, 6 de noviembre de 2011

Priego blanco... cuando nieva por estas tierras.



Los últimos inviernos, raro es el que no nos deja algún día de frío y nieve. Unos más y otros menos, nos estamos acostumbrando a ver nuestras calles vestidas de blanco, y no solo la Tiñosa, sino todos nuestros tejados y monumentos.

Pero en enero de 2009, en la noche del día 9 y madrugada del 10, tuvimos una nevada  de las que siempre se recuerdan, de esas que caían copos como "puños", y que la nieve cuajaba sobre cualquier superficie. Con mi cámara al hombro salí a recorrer nuestras calles y lugares más emblemáticos, y me levanté antes del amanecer para captar unas tomas inéditas por estas latitudes.

El amanecer desde los Adarves, con toda la vega y las sierras nevadas, es una de las fotografía de las que más orgullosos estoy.

Pero como con esto de las fotos e intenet, nunca está uno  contento del todo, resultó que tras enviar algunas fotos a mis amigos vía correo electrónico, a los pocos días recibí un Power Point de "Priego Nevado", en el que aparecián mis fotos, sin indicar la procedencia y sin firma..... como podéis imaginar, el rebote fué grande, y sin tener ni puñetera idea de hacer un Power Point, recuerdo que me dieron las 5 de la madrugada hasta conseguir algo que mereciera la pena, y tras retocarlo y ponerle música, (Noches de blanco satén interpretada por "El Divo"), lo lanze vía e-mail a casi todos mis contactos, que lo reenviaron masivamente.

Por esto se que muchos conoceréis estas fotos que hoy os subo, pero algunas, presentadas por si solas, creo que merecen la pena tenerlas.

Al final os dejo un video del Power Point, en el que se pierde bastante calidad, y si alguno lo queréis original, os lo mando rapidamnete.



La primera foto la hice desde el balcón de mi casa, en la Carrera de Álvarez

En el Paseillo los copos caían con fuerza

Y la fuente del Rey el alvero se tronaba en blanco.

Pocas personas se atrevieron a salir.

Los jardines se ponían cada vez más bellos.

Y los árboles tornaban sus ramas por cristales.


Hasta las palmeras cambiaron de color.



Jardines de la Fuente del Rey


Jardines de la Fuente del Rey


Si disparabas con flas, los copos se veían mucho mejor.

Fuente del Rey.... el vapor que salía del agua, formaba un remolino ante el objetivo

Cúpula de la calle Río

Farol de un balcón con varios centímetros de nieve.

La iglesia del Carmen.

En el llano, ya no nevaba, y la vista de la Parroquia y los jardines eran espectaculares.

La belleza de los tejados de la Asunción.



Plaza de San Antonio, en la Villa


Calle de la Villa

Las macetas de geranios cambiaron el verde por el blanco.

Árboles de los bajos de los Adarves


Y a la mañana siguiente, Priego amanecía más blanco que nunca.


Aún con  el alumbrado encendido, las primeras luces del día nos dejaban un espectáculo especial.

Amanecer desde los Adarves


Los Adarves

Un soporte de un farol de los balcones del Paseo de las Rosas, acumula nieve de la noche anterior.

Paseo de las Rosas

La vega de Priego, con sierra Leones al fondo.

Sierra Cristina o sierra de los Judíos.

Adarves.

La noche fué tan fría, que la fuente del llano estaba totalmente congelada.

Con la salida del sol, la nieve comenzó a fundirse, pero la luz hacía más bellos los paisajes.

Corazón de Jesús.

Castillo.

La Vega y Sierra Cristina

Sierra Leones

Zona de la vega y del polígono industrial.

Huertas de los Adarves.

Puerta del Sol.


El  paseo por debajo del Adarve, fué precioso. La nieve superaba los 10 cm, y crujía al pisarla.

Las murallas del Adarve tam´bién se cubrieron de blanco.

La vallas que delimitan este recorrido estaban aún intactas, y marcaban el recorrido.

Los árboles y verjas, tejian un hilado blanco.








Y al final del paseo, llegamos a la Puente llovía.

que parecía un verdero cristma navideño



Y hasta aquí llegó este paseo y este reportaje que titule "PRIEGO BLANCO".


Priego de Córdoba a 6 de noviembre de 2011